COMPOSICIONES ESPACIALES DE LUZ Y COLOR
Estructuras onduladas orgánicamente en el espacio: Susanne Rottenbacher se deja inspirar por PLEXIGLAS® y sus múltiples propiedades para su arte lumínico.
Sujetas por finos cables metálicos, las cintas de luz relucientes de color verde-violeta y amarillo se atornillan entre sí formando curvas audaces que ascienden a hasta seis metros de altura en el aire. La luz del día que penetra a través de las claraboyas se mezcla con la luz de los LED de colores, generando un fascinante juego de luces, colores y sombras sobre el suelo liso y gris. Esta instalación luminosa que llena la sala ha sido bautizada por Susanne Rottenbacher como "Disassembly", lo que puede traducirse por "desmontaje" o "descomposición".

Con ello, la artista quería hacer visible la «fragmentación de la luz y el color al entrar en la sala», según explica ella misma. Con una superficie de 100 metros cuadrados, «Disassembly» es uno de sus trabajos de mayor tamaño para espacios interiores, y al mismo tiempo una de sus construcciones más complejas con PLEXIGLAS®, en este caso diseñada expresamente para la galería berlinesa BOX Freiraum. Esto se debe a que Rottenbacher incluye siempre al espectador y el entorno al diseñar su arte. Así, la superficie plana y la transparencia de la instalación contrastan llamativamente con los muros de ladrillo de la antigua caballeriza en la que está situada la galería.
Juegos de luz y reflejos
El efecto de «Disassembly» varía según la hora del día. La luz del día se refleja, atravesando los arcos transparentes de color de PLEXIGLAS®; por la tarde domina la luz LED encargada de iluminar la obra de arte.
Transparencia y vivacidad
Ciertamente, la transparencia es un aspecto importante del trabajo de Rottenbacher con cristal acrílico, pero no es la única razón por la cual ella trabaja casi exclusivamente con este material desde hace muchos años: «También me interesan la profundidad ‘mecánica’ del material y su vivacidad: los puntos transparentes, los reflejos, las superposiciones, las roturas y la formación de capas de colores». La instalación «Disassembly» está compuesta en su mayor parte de PLEXIGLAS®, que junto a las cintas de luz LED programables son la materia prima predilecta de Rottenbacher. A partir de estos componentes, la artista ha creado un trabajo afiligranado que a una crítica de arte le recuerdan a «exposiciones fotográficas prolongadas que retienen únicamente las huellas de los movimientos».
La unión del arte y las capacidades del plástico
"A través del PLEXIGLAS® y de la construcción translúcida fluye luz de colores dentro de la sala, incorporándose la luz ambiental a la obra"
- Susanne Rottenbacher
artista lumínica
La impresión de ligereza fina y elegante es el resultado de un proceso de fabricación sofisticado y sumamente laborioso. La estructura y las imponentes dimensiones de «Disassembly» determinan por sí solas elevadas exigencias técnicas en cuanto a resistencia a la rotura y estabilidad de forma del material utilizado. Según Michael Fritz, director de la filial berlinesa del distribuidor de PLEXIGLAS® thyssenkrupp Plastics, lo que se buscaba era un material que se pudiera «moldear, pulir y estampar fácilmente» y presentara una «excelente resistencia a la radiación UV». Este conjunto de exigencias condujo casi automáticamente a PLEXIGLAS®, como aclara Frank Fräntzel. Su empresa Fräntzel Kunststoffe GmbH con sede en Rangsdorf, cerca de Berlín, colabora desde hace más de cinco años con Susanne Rottenbacher en calidad de transformadora. Juntos, los dos socios han realizado más de una docena de proyectos desde Berlín hasta Baden-Wurtemberg, así como en Niza, Osaka y Bombay, para particulares, museos y empresas.
«En ‘Disassembly’, trabajamos aproximadamente en un 85 por ciento con PLEXIGLAS® GS incoloro», señala Fräntzel. El color se aplicó posteriormente mediante un proceso de impresión directa digital; a continuación, las planchas se serraron, fresaron y termoformaron parcialmente. Para la unión de distintos elementos de PLEXIGLAS®, ACRIFIX® 2R 0190 fue el medio escogido, ya que este adhesivo multicomponente actúa «como PLEXIGLAS® líquido y permite uniones absolutamente invisibles y exentas de burbujas», como explica Fräntzel. Únicamente para las canaletas de cables y los tubos de paso de las cintas de luz LED se empleó policarbonato moldeado en frío, que se atornilló a los elementos de PLEXIGLAS®. «El recubrimiento exterior debía ser perfecto, como si estuviera hecho de una sola pieza», subraya Fräntzel, y en cuestiones de calidad de superficies y capacidad de pulido, Röhm y su cristal acrílico de marca «siempre están un paso por delante».
Misión Bombay
Rottenbacher no solo diseña arte para espacios interiores, sino también para exteriores. El material utilizado para ello debe satisfacer requisitos totalmente distintos, ya que está expuesto a agentes tales como el agua de condensación, la corrosión, el granizo y el peso de masas de nieve o agua. Por ello, las obras para exhibición en exteriores deben ser «mucho más macizas en cuanto al espesor del material y la estructura que las obras de interiores, lo cual, no obstante, no debe apreciarse visualmente», explica la artista. Esto se muestra con especial claridad en la escultura luminosa «Spin!», que adorna un nuevo complejo de edificios en Bombay a modo de rueda en rotación desprendiendo chispas: su recubrimiento exterior está compuesto por PLEXIGLAS® con un espesor de 10 milímetros, de manera que la estructura puede soportar tanto las intensas lluvias monzónicas como los vendavales. Pese a ello, gracias a la transparencia del material, no da la impresión de ser maciza. «Además, PLEXIGLAS® se mantiene libre de grietas y decoloraciones durante muchos años, y la amplia resistencia térmica y la protección UV propia del material también tienen una gran importancia», destaca Rottenbacher. Así, los compradores y espectadores pueden disfrutar de sus obras durante años, e incluso décadas.